La Ortodoncia y Ortopedia dentofacial
es una especialidad de la ODONTOLOGIA que se encarga de interceptar y corregir MALPOSICIONES DENTARIAS y de los MAXILARES, ésto se logra con aparatos fijos intraorales o por aparatos extraorales removibles.
La Ortodoncia puede ser empleada a cualquier edad ya que una mala mordida o dientes en mala posición pueden provocar caries, encías enfermas, destrucción de hueso, pérdida dentaria y problemas articulares.
Contamos con la tecnología de vanguardia para dar a cada paciente estética y función, logrando una buena oclusión y una sonrisa en armonía con sus características faciales. Este balance se refleja en su autoestima y salud general.
7 Años, Una Edad que recordar
En el consultorio se siguen los lineamientos de las Asociaciones Americana y Mexicana de Ortodoncia, quienes recomiendan que la primera evaluación de un paciente debe ser a los 7 años.
Aunque no se iniciara a ésta edad algún tipo de tratamiento activo, una temprana valoración nos permite monitorear el desarrollo de tus hijos y determinar oportunamente cuando es el momento correcto para iniciar tratamiento. Una detección temprana de un problema existente puede reducir la necesidad de extraer dientes permanentes o si ello es indispensable, el tiempo de tratamiento de una segunda fase también se reduce. Resultados positivos se obtienen cuando se requiere de desarrollo a favor si se inicia a temprana edad, de otra forma sería difícil obtener ese resultado cuando el crecimiento ha terminado.
En el pasado, era común que el tratamiento de Ortodoncia se pospusiera hasta los años de adolescencia, cuando todos los dientes permanentes hubieran erupcionado. Actualmente sabemos que muchos de los problemas de ortodoncia pueden y deben ser tratados ha edad temprana ya que es mucho más fácil trabajar sobre el mal desarrollo de los Maxilares cuando existe crecimiento de los mismos lo cual sucede alrededor de los 7 años y un segundo “ estirón “ a los 12. A esto se le llama primera fase de tratamiento y en ella usualmente de emplean aparatos con función Ortopédica sobre los Maxilares y otros huesos de la cara.
Tratamiento de Dos Fases
Un tratamiento ortodóntico de dos fases es un procedimiento especializado que sólo ciertos niños necesitan.
El tratamiento suele comenzar antes de que hayan erupcionado todos los dientes permanentes. En Ortodoncia Mazatlan consideramos que este tratamiento debe limitarse a aquellos pacientes con mordidas cruzadas esqueléticas, un desplazamiento lateral de la mordida excesivo o un apiñado de las arcadas entre moderado y severo.
La mordida cruzada esquelética es un problema ortodóntico debido a una anchura limitada del maxilar superior. Puede ser un defecto genético, y podría agravarse por problemas al respirar por la boca a raíz de una obstrucción nasal. Se manifiesta con la ubicación de los dientes posteriores dentro o cerca de la lengua en relación a los dientes superiores creando una mordida cruzada posterior; o como prognatismo en el segmento anterior en casos de mordida cruzada anterior. El tratamiento requiere un expansor de paladar y posiblemente frenos anteriores para alinear el segmento anterior superior, dependiendo de la naturaleza de la mordida cruzada.
Hay dos factores que pueden causar un desplazamiento lateral excesivo de la mordida (empalme horizontal de los dientes anteriores superiores): la protuberancia de los dientes anteriores superiores o la retracción del maxilar inferior. El tratamiento puede requerir un uso limitado de frenos para reducir la protuberancia de los dientes superiores o posiblemente aparatos para acomodar las mandíbulas con la intención de mejorar el movimiento del maxilar inferior hacia adelante, en relación al maxilar inferior, creando una nueva dirección hacia adelante.
Puede que los arcos apiñados requieran la extracción de dientes primarios o permanentes para aliviar el apiñado. Esto puede o no ser seguido por la colocación de mantenedores de espacio hasta que hayan erupcionado todos los dientes permanentes.
La meta del tratamiento de dos fases es crear un ambiente que le permita al paciente desarrollar, lo más normalmente posible, la dentición mixta (la presencia tanto de dientes permanentes como primarios), y para que la segunda fase (tratamiento comprehensivo) sea más fácil de llevar a cabo, y que su resultado final esté tan cercano a la perfección como sea posible. Cabe destacar que la posición de los dientes, una vez completada la primera fase del tratamiento, no será la posición final del diente. La posición del diente no será final hasta que se lleve a cabo la segunda fase del tratamiento. No todos los pacientes necesitan este tratamiento.